sábado, 21 de mayo de 2016

Obituarios intervenidos

El domingo pasado estuve con Santi y con Sol en ese museo navarro del que dicen que lo más visitado es el bar, el Centro de Arte Contemporáneo Huarte. Por desgracia Sol y yo llegamos más bien justitas a la cita y no pudimos comprobar la calidad de los pinchos que han dado fama al establecimiento. Entre lo que más disfrutamos dentro, que fue una exposición sobre autoedición, encontramos el libro Cadaveres Exquisitos, de Txuspo Poyo. No sabía nada de esta obra tan interesante y tampoco pude admirarla en su totalidad pero la quiero ya. Es un objeto infinito, sin fecha de caducidad, para poseer. Se puede comprar, y barato, en Banizu Nizuke.


No hay comentarios: