Muchas felicidades, Ramón

Lara y el mar

Arquitectura humana

Mi amiga Lutxi decía que no cuelgo nada sobre México. A ella y a Gloria casi no me ha dado tiempo a contarles mucho de mi viaje. Como al ver esta obra pensé en las dos… aquí va este adelanto de mi relato sobre la exposición El teatro del mundo. (Gracias a Alejandro que me llevó, entre otros lugares, al Rufino Tamayo. Gracias a Laila que me presentó a Alejandro.)
Me traje el catálogo como recuerdo y para poseer un libro diseñado por Alejandro Magallanes, claro.

Limpieza

A veces tanta economía me ha llevado a echar de menos vida en los miembros de esta familia. A veces me parecía un simple folletín que me tenía enganchadísima. Mi ansiosa lectura no ha sido limpia. Reconozco que buscaba con entusiasmo llegar a algo especial. Buscaba la tranquilidad que me produjo Tierra desacostumbrada. Tenía más misterio o magia o lo qué sea que muchas veces tienen para mi los cuentos.

La tienda

En Oaxaca hay unos cuantos museos construidos o reformados para pasear disfrutando de rincones, flores, espacios vacíos y líneas rectas. También encuentras muchas tienditas cercanas y elegantes de las que te llevarías todo.
Tingladógraphy me llamó la atención desde las postales promocionales, con colores preciosos, que tiene dispersas en barras de bares y cafés. Busqué el lugar. Entré. Sonaba la canción sobre la ciudad triste de Nacho Vegas. Hablé al aire, al chico que estaba en el altillo. Bajó y charlamos. Reímos con la casualidad. Admiré sus fotos y el resto de la mercancía. Me ayudó a escoger un regalín para Samuel. Me contó que la gráfica era de un amigo: Conrad Torras. Me quedé con ganas de volver.

Arte conceptual

Me hubiera comprado todos, o al menos unos cuantos más, los libritos de la editorial Alias. En mi cabezota no entra tanto discurso y en mi maleta tampoco. ¡Pero los recomiendo!
Este, con una cita muy acertada sobre la traducción, me ha recordado la conversación sobre el tema con Miguel entre baile y baile.

Son geniales

Kruntzel y Deygas no solo trabajan para o en películas.

Volando redescubrí estos títulos «rollo Saul Bass»

Biblioteca ciega

Este evocador proyecto es una instalación pictórica en las medianeras del centro histórico de México que descubrí desde los miradores de ese lugar tan agradable como bien situado: el Centro Cultural de España.

Adicta al sexo

La semana pasada vi Nymphomaniac. El conjunto de las dos partes delicado no me pareció pero entretenido sí. Me resultó familiar y a la vez curiosa, después de ese clasicismo narrativo de  "Melancolía" (era lineal, ¿no?), otra vez la forma de contar de Lars von Trier. El paralelismo entre las relaciones sexuales y ciertas obras de la naturaleza o literarias y musicales me pareció rico pero artificial en exceso. El final ya lo remató. No se si es una broma pesada o no. Parece que para algunos críticos tiene sentido.
Los carteles impecables. La serie de los personajes fotografiados en el momento del orgasmo fue una publicidad estupenda, aunque poco o nada tenga que ver con la historia. Y las versiones menos.

La Stí Bi (Eco del Viento). Trémula. Rogelio Sosa.

Muy triste

Una realidad muy dura y de la que apenas era consciente cuando estaba haciendo turismo por México es la que cuenta esta película de la que Roxana ya me había hablado antes de salir hacia allá. Al llegar, como ya no estaba en la salas comerciales, Lola me la dejó (hablábamos de bastantes películas, ella trabaja en La Casa del Cine) y pude verla en su ordenador. Me costó concentrarme porque era sábado por la noche y mucho ruido de la calle entraba en la casa.

Cita y plantón

El último día de mi estancia en Ciudad de México quedé con Miguel en la Cineteca. Quería conocer el lugar y además habíamos hablado ya el día anterior de ir al cine. Al final él no se presentó y, como yo no encontré wifi, me fue imposible saber que estaba retenido en su curro. Entré a la peli que habíamos previsto, Finsterworld, del ciclo de cine alemán. Cuando vi la cartelera y encontré este tipo de imágenes… me decidí enseguida. Merece la pena dejarse llevar por esta historia agridulce medianamente original.

¡Esos dibujines!

Por supuesto, uno de los lugares de los que más he hablado al volver de México es el metro. Antes de ir ya me contó Estrella lo de los vagones para mujeres (como en Japón, pero la señalización manual, más cutre y auténtica, de quita y pon) en las horas pico. Supongo que había leído antes algo sobre su sistema de iconos pero… vivirlo es otra cosa, claro. Esta señalética ha recibido varias críticas, entre otros motivos por el paso del tiempo y los cambios sociales y educativos que conlleva. A mi me hipnotizaba e intentaba, inútilmente en general, saber por qué lugares estábamos pasando descifrando cada imagen.