Impresionante canción final para una película, La juventud, que ya creía que se me pasaría (a pesar de las críticas negativas quería verla). Fuimos Santi, Julio y yo a los Renoir el domingo y salimos encantados (a lo mejor porque no esperabamos fuegos artficiales) con la música y con ganas de cantar. Es mucho menos frenética, y menos fascinante por desgracia, que La gran belleza pero de todos modos yo me perdí en algunos momentos. En otros disfruté a pesar que los personajes estaban un poco como por estar. ¿Será que a un balneario se va a eso?
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